La Feria del Ajo se ha convertido en una tradición en el verano de Castrojeriz. Cada año, los productores se dan cita con un público ávido de conocer cómo ha sido la cosecha y si los ajos de este año son tan buenos como la pintan que traen. De las propiedades del ajo se saben muchas cosas y todas buenas; su poder antibiótico está reconocido y su utilización en las civilizaciones egipcia y griega también está documentada. La relación del ajo con Castrojeriz también se remonta varios siglos atrás y esta unión se ha consolidado en los últimos años.
El ajo no es un cultivo que ocupe muchas hectáreas en la comarca pero sí es una tradición que han mantenido varias familias. Una tradición que incluye tejer ristras para que las cabezas de los ajos luzcan de la mejor forma posible. El ajo en Castrojeriz se cultiva con mimo, se limpia con cuidado y se presenta como lo que es, un producto indispensable en todas las cocinas, en todas las gastronomías mundiales.
En esta Feria el ajo es el único protagonista y, por este motivo, cada año las peñas de Castrojeriz se encargan de elaborar sopas de ajo y pollo al ajillo, también dos platos muy tradicionales en nuestra cocina. La colaboración de las peñas y de otros voluntarios es fundamental para que la Feria sea cada año el reclamo para que cientos de personas guarden este día en el calendario y acudir a la villa castreña.
Junto al ajo y su degustación también tienen cabida otros alimentos en el mercado de productos artesanos que también hacen las delicias de castreños y foráneos que se acercan a esta villa a rendir culto al ajo.
Enlace al Programa de la Feria.
